martes, 4 de diciembre de 2012

Jóvenes y esperanza

 
 

 
 

Los jóvenes se posicionan al lado de los más débiles y se ponen en manos de Cáritas para formar parte activa del regimiento de personas solidarias que arriman el hombro para ayudar a los que, como consecuencia de la crisis, se encuentran en riesgo de exclusión social. La labor de concienciación que Cáritas diocesana ha realizado durante este curso escolar en algunos institutos de León ha permitido sumar un grupo de nuevos ‘discípulos’ que se ponen a disposición de la institución de la Iglesia. Setenta jóvenes con edades comprendidas entre los 16 y los 17 años forman parte del programa «Caminando juntos», una iniciativa, coordinada por el sacerdote y sociólogo Prisciliano Cordero, pensada para «paliar la soledad» de setenta personas mayores que viven en residencias. El alumnado procede de los institutos Lancia, Legio VII, Asunción y Carmelitas que, desde el 6 de noviembre, dedican parte de su tiempo libre a visitar a los ancianos de las residencias Virgen del Camino, Santa Luisa, Juan Pablo II y Santo Martino. «El programa ha tenido más aceptación de la que esperábamos, de hecho, hay diez alumnos que todavía no han empezado porque no tenemos más personas mayores a las que atender».

La presidenta de Cáritas en León, Beatriz Gallego, explicó que el programa, de carácter nacional, pretende «paliar» las «enormes diferencias» de los colectivos sociales, «la ancianidad», dijo, «es cada vez más larga y en ocasiones resulta triste y solitaria». Tras la presentación de este programa, un grupo de 120 jóvenes de 17 años de Carmelitas y Teresianas se dieron cita en Botines para participar en un Flashmob, una puesta en escena de una actividad teatral en la que los estudiantes taparon sus caras con caretas blancas para así dar visibilidad a las personas ‘sin techo’, 40.000 en toda España y 160 en León, según los datos de Cruz Roja. Prisciliano Cordero alertó que el 12% de las personas que duermen en la calle tienen una carrera universitaria pero que con la crisis, sufren marginación.

Fuente: Diario de León
 



 

"Las caretas representan a las personas sin techo que vemos por la calle, pero a las que no llegamos a ver la cara porque giramos la nuestra", explicaba Vicente Guillán, trabajador de Cáritas y organizador del 'flashmob'. "Los lazos reflejan la red de solidaridad para ayudarlos".

Entre ellos se han ido pasando un mensaje, el lema de la campaña: 'Son derechos, no son regalos, nadie sin hogar'. Guillán ha insistido en que "hay determinados derechos que hay que evitar que se supriman en estos tiempo de crisis".



 

6 comentarios:

  1. Todos tenemos que ayudar(nos) en estos tiempos difíciles, aunque sea con un paquete de arroz.
    Ya que los gobernantes pasan, nosotros debemos reaccionar.

    Me alegra ver a tanta juventud consciente y comprometida.

    Abrazos

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  2. A mi se me parte el corazón cuando los veo.
    Solo puedo decirte que rezo y colaboro con caritas,
    en todo cuanto puedo. ¡Gracias Rosa!
    Un abrazo fuerte. Dios te bendiga.

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  3. Esa iniciativa es extraordinaria y lo de las caretas muy significativo. Me alegro del éxito obtenido.

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  4. Siempre he creído en los jóvenes, sólo necesitan que sus ilusiones y su deseo de realizarse sea recunducido hacia obras buenas donde ellos se sientan útiles porque es innato en ellos DAR.
    Las crisis siempre dolorosas producen también, además de santos, estas iniciativas tan admirables. Hay tantas necesidades.
    Qué bueno que nos lo cuentes, Rosa

    Muchas gracias por tu comentario, ando un poco baja de moral por lo que habrás comprado en mi blog.
    Un beso con cariño

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  5. Ojalá que todos esos jóvenes se impliquen y acaben colaborando con cáritaas de modo activo. Cáritas está haciendo mucho por los que de verdad lo necesitan, todo apoyo es poco.

    Gracias, Rosa, por traer estas cosas a tu blog y ayudar a que nos conciencemos.

    Besos.

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  6. Gracias a todas, ¡es tiempo de Esperanza...!

    Muchos besos.

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