miércoles, 1 de mayo de 2013

Con flores a María...


  
 

 

 
 
Mes de mayo, mes de nuestra Madre. Hoy, he tenido continuamente esta canción dentro. En el mes de mayo, en el colegio, siempre la cantábamos. Preparábamos un ramo de flores el día anterior. Mamá, le decía a mi madre, tengo que preparar un ramo para la Virgen, que mañana vamos a la gruta a ofrecérselo. La gruta era para nosotras una verdadera excursión, se encontraba dentro del recinto del colegio, pero lo suficientemente alejada para que nos pareciera un día especial. Caminábamos en fila, cantando, y cuando llegábamos, cada una dejaba su ramo a los pies de nuestra Madre. Ese recuerdo sigue muy vivo y quiero compartirlo con vosotros. Los nacidos en los sesenta y setenta, seguro que lo recuerdan muy bien, era habitual. Hoy, sé que era una excursión fundamental, mis queridas monjas asuncionistas, nos transmitieron con mucho  cariño el amor a la Virgen. Esta canción es para mí muy especial, de mi infancia, de la raíz: "Venid y vamos todos, con flores a María, con flores a María, que Madre nuestra es..."
 
De mi casa, la de mis padres, la devoción que más conservo es al Sagrado Corazón de Jesús, la Virgen María era igualmente venerada.
 
Y existe una vivencia, que no he olvidado. En una conferencia, hace años, sobre la evangelización a través del arte. El conferenciante era, es, un sacerdote que "vive" cada una de sus explicaciones, es una delicia escucharlo. Tenía a mi lado a una mujer mayor. La miré cuando me senté a su lado y nos sonreímos. Cuando comenzó la conferencia y pusieron las diapositivas, en una de ellas especialmente, de la Virgen María, esta mujer dijo: ¡Qué guapa, qué guapa!, bajito, muy bajito. La miré, y su cara era tan dulce, reflejaba tanta devoción, que me contagiaba, me contagiaba...cuando terminó la conferencia, se lo dije, el bien que me había producido mirarla, y sonrío, igualmente, con una gran dulzura...
 
Hoy, casi todas las mañanas, cuando voy a clase, me cruzo con el sacerdote conferenciante. Nos saludamos y nos sonreímos. Agradezco infinito el haber asistido a aquella conferencia.
 
En estos momentos de mi vida, el mejor rezo que he descubierto, es el Rosario, el Rosario bloguero. Gracias a esta iniciativa, difundida amorosamente, sábado a sábado por verdaderos amigos en la fe, rezar el Rosario es para mí una verdadera bendición. 
 

 
 
Gruta del colegio de la Asunción de León en la actualidad


 

Santuario de la Virgen de Covadonga (La Santina). Asturias

 

Y a los pies de la Santina, en Covadonga, el padre Poveda, recibe la gracia, la Idea buena de la fundación de la Institución Teresiana.

En palabras del padre Poveda, la fundación de la Institución Teresiana “surgió y cristalizó mirando a la Santina”.
 
 
  
 
 

Venid y vamos todos con flores a porfía,
con flores a María, que Madre nuestra es (bis).


De nuevo aquí nos tienes, purísima doncella,
más que la luna, bella, postrados a tus pies.

Venimos a ofrecerte las flores de este suelo,
con cuánto amor y anhelo, Señora, tú lo ves.

Por ellas te rogamos, si cándidas te placen,
las que en la gloria nacen, en cambio, tú nos des.



 

 
 

4 comentarios:

  1. toda una institución el mes de mayo y la flor de cada día.

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  2. Gracias por recordarme este mes de María.
    Rosa escribes muy hermoso.
    SL2!!
    DTB!!

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  3. Pues yo comencé el mes de Mayo, el mes de la Virgen, con una romería, hay mucho que pedir y mucho que ofrecer. Un abrazo y a seguir dándole al rosario, hasta que se gasten las cuentas. Un abrazo

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  4. Qué buenos recuerdos, Rosa.
    De pequeña también haciamos las flores a María en el colegio. No teníamos gruta, pero sí a la Virgen Blanca de la capilla del colegio.
    Es una tradición que no he perdido, y que seguro que a María le encanta.

    Como el papá del sillón, también empecé el mes con una romería.

    Besos.

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