sábado, 21 de diciembre de 2013

Busco tu rostro





Busco tu rostro, Señor; quiero verte.

Tengo sed, quiero encontrarte.

A veces me quejo por tus largos silencios.

Tu silencio guarda tu misterio.

Eres todo bien y belleza; no soy capaz de abarcarte.

No es que calles permaneciendo indiferente a mi súplica.

Hablas de modo diferente y no siempre percibo tu voz ni te comprendo.

Que te acepte como eres y así te siga.

Que así te entienda, que así te ame.
 
 



Quiero aprender a escucharte.

Tú eres la Palabra, me hablas del amor del Padre.

Tú eres el Camino, me muestras siempre Tu Voluntad.

Tú eres la Luz del mundo, iluminas las cañadas más oscuras de la historia.

Tú eres el Buen Pastor, estás siempre a mi lado.
 
 


 
Que mi corazón esté siempre preparado para acogerte, como María.

¡Muéstrame tu rostro!
 
 
 


 
¡Dame, Señor, un corazón que escucha!


P. Evaristo Sada

 
 
Sábado, día del Rosario bloguero.
 
 
 
 
 

6 comentarios:

  1. En el camino de María lElla nos ayuda a pasar el desierto.


    Feliz Navidad querida Rosa.

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  2. Esa eb mi lucha, Rosa, escucharle.
    Está muy bien reflejada en esas palabras que has elegido, gracias amiga.
    Qué Navidad tan diferente la de este año.

    ¿Podrás hacerme el favor de meter en el Rosario de mañana a mi sobrina Elisa? No es bloguera ni rosariera, pero lo necesita mucho, contra la opinión del médico ha dejado la clínica porque dice que quiere morir en su casa, como su padre que lo hizo con tanta paz. Imagínate como está mi hermana.

    Perdona, Rosa, pero ando "tocadita"
    Escucharemos al Señor en sus balbuceos en el Portal de Belén.
    Besos, Rosa.


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    1. Es verdad, Militos, nos faltan seres queridos, pero la alegría interior es la misma.
      Siempre estás en el Rosario, también tu sobrina, mucho ánimo, mi querida Militos.

      Ya sabes que siempre estoy contigo.

      Muchos besos.


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  3. Qué bello. Te deseo unos santos días llenos de esa Presencia que debe envolvernos de modo especial al celebrar la Natividad de Nuestro Dios. Se dice pronto...
    Un abrazo fraterno. En su adoración nos encontraremos, en esa Noche Santa.

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    1. Gracias, mi querida Caminar, en su adoración nos encontraremos en esta Noche Santa.

      Muchos besos y gracias por tu compañía.

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