La Hoja del Arce: pasión de Amor

Llevo varios días sin publicar, es algo habitual en otras circunstancias, pero últimamente no es así.
He recorrido en estos días muchas entradas que me faltaban, y me faltan, releyendo otras, del blog de la Hoja del Arce.

Este blog es un tesoro, aunque insista e insista, siempre me quedaría corta. Un contemporáneo nuestro, un seglar. Recorrer el blog de Arcendo se convierte en una verdadera catequesis, dejó su testimonio de vida en él, su alma, un testimonio ejemplar, envidiable, profundo.

Su testimonio me llena de vida, me vivifica, me anima, me empuja.

Ardor, pasión al hablar de Dios, de Jesús, de la Virgen María, que muestra en todas las ocasiones.

No creía en nada de esto de evangelizar a través de las redes sociales. Me parecía casi imposible. Pero nada hay imposible para Dios, Él sabe muy bien por dónde nos encamina.

Me di cuenta de que me faltaba rezar más profundamente, dedicar momentos a la oración contemplativa, serena, percibí mis carencias, a medida que leía lo que Arcendo compartía. Era tan profundo lo que sentía cuando leía. Que una persona, que debía sentirse agotada, con un cáncer y una operación posterior muy costosa, fuera capaz de compartir continuamente, me emocionaba.

Arcendo seguía animando, rezando, ofreciendo su dolor por todos nosotros, "agarrado" a la Cruz. Pendiente de su blog, que hizo también nuestro. A mí esto me dejaba sin palabras. Muchas veces, no sabía qué decir, salía llorando de agradecimiento por todo lo que allí recibía. Se sentía el primer mandamiento: Amarás a Dios sobre todas las cosas, y Arcendo cumplía igualmente: y al prójimo como a ti mismo. Lo cumplía, se notaba. Por eso su blog está lleno de Vida, y nos llevaba a compartir también la nuestra.

Me condujo a rezar más, a intensificar mi vida de oración y, sobre todo, me invitó a rezar el Rosario.

Su canal en YouTube, su blog, horas y horas dedicadas a la evangelización, con profundo amor, alegría, esperanza, fe y caridad hacia todos los que tuvimos la suerte de compartir algunos momentos de su vida. Hasta el final dio testimonio. ¡Gracias, Hoja!

Si queréis visitarlo, su blog continua, su familia, generosamente lo ha dejado para bien de todos. Una joya que no debería perderse.
Me llena de esperanza que un laico, un "capitán de los tercios blogueros", como diría su amiga del alma, Militos, y otros compañeros y amigos de la Hoja: Bruce, Angelo, Mento, María del Rayo, Ramón, Elías, Terly, Marian, Caminar, Julieta, Belén, Gosppi, Marisela...¡todos!.. sor Cecilia (mi querida sor Cecilia que me condujo hacia este blog),  haya cumplido su cometido: evangelizar en las redes sociales.

Os dejo un maravilloso vídeo, como todos los suyos, lleno de Vida, de Amor, de Esperanza, de Fe.

Me emocionó cuando lo vi.

¡Gracias, Hoja!

Gracias a todos los que se dedican a la encomiable tarea de evangelizar en las redes sociales, a mis compañeras y amigas, Tracy y Quartier Latin, que han permanecido a mi lado.

Todo comenzó con un premio que Tracy me regaló y me llevó a salir del mundo de mi cocina, al que no renuncio, se encuentra unido a mi madre y a mi abuela. Fue el comienzo.

Gracias también a todos los que me acompañáis en este blog.  Un placer.