El próximo 4 de marzo se estrena en toda España el filme dirigido por Pablo Moreno y producido por Goya Producciones, en asociación con Three Columns Entertainment, con un reparto encabezado por Raúl Escudero y Elena Furiase. Es el biopic de san Pedro Poveda. Llegará pronto a otros países y otros idiomas. Poveda fundó, en 1911, en Covadonga, la Institución Teresiana, que hoy está presente en 30 países.
Pablo Moreno, el director, afirma: “Aceptamos el reto después de ver la magnífica historia que era la vida de Poveda, para nosotros desconocida. Enseguida supimos que tenía gran relevancia. Son esas historias que nos tocan desde el principio, por lo que quisimos hacer una película que estuviera- a la altura del padre Poveda. Aparte de ser un gran pedagogo y de pretender, con grandes esfuerzos, hacer una modernización de la educación en la España del siglo XX, y de su sensibilidad hacia la pobreza -no hay más que ver todo lo que hace en Guadíx con los cueveros–, nos ha interesado mucho y creemos que tiene gran actualidad, su empeño por la promoción de las mujeres”.
Actor y músico, Raúl Escudero, Palencia, 1980, es el protagonista de esta película que lleva a la gran pantalla la vida del sacerdote y pedagogo linarense. Curtido en las tablas, este es su quinto largometraje, el primero como protagonista. Premio al mejor actor por la Unión de Actores de Castilla y León en 2012, destaca el tesón y la capacidad de superación, como dos características esenciales del personaje que interpreta.
“Para mí –afirma– ha sido sobre todo, un cambio grande, tanto en el aspecto personal como profesional. Había abordado papeles protagonistas antes pero siempre en el teatro nunca en cine. El cambio ha sido sobre todo en confianza, una experiencia muy grande a todos los niveles. Y en la parte personal, cuando te acercas a un trabajo, al que sea, empiezas a investigar qué tipo de persona, cómo lo vas a abordar, a qué se dedica, qué le pasa, qué le sucede… y de repente te encuentras con un personaje real, que la gente conoció; y lo que hace es generarte una responsabilidad grande”.
“Lo que hay que hacer es quitársela –añade–, es decir, descubres que Pedro Poveda fue una persona normal, como cualquier otra persona que ríe, se cae, que tendrá sus momentos y que tiene sus necesidades como todos. Lo que hizo es lo extraordinario. Descubres que lo principal, o lo más importante, es que tuvo esa capacidad de superación y de seguir avanzando. Y si te van poniendo trabas, da igual. Hay que levantarse, encontrar la estrategia nueva. Al final es una similitud, con tu vida personal y tu vida profesional. Tienes dificultades, pues vamos a ver cuáles son los recovecos para salir adelante. Y personalmente lo mismo, siempre va a haber palos en la vida, gente que te ponga zancadillas y circunstancias que te van a impedir a priori avanzar. Lo grande está en encontrar cuáles son los lugares por los que colarte, o los puntos débiles de ese muro que al final se puede romper”.
— Raúl Escudero destaca de Pedro Poveda: “El tesón y la capacidad de superación. ¡Le pusieron tantos palos en las ruedas! Y él siguió levantándose y luchando por lo que creía. Cada persona tendrá sus motores, sus creencias, sus motivaciones pero lo que está claro, que es común a cualquiera, es que todos tenemos capacidad para poder seguir levantándonos y luchando por llegar a donde nosotros queremos, o creemos”.
Basada en hechos reales, Pablo Moreno ya dirigió otra película sobre los dominicos martirizados en La Mancha. en la guerra civil (Un Dios prohibido). El guión ha sido escrito por él y Pedro Delgado.
La película narra la historia de san Pedro Poveda (Linares, 1874-Madrid, 1936) Sacerdote tenaz e innovador, que abre caminos en el campo de la educación y en la defensa de los derechos de las mujeres en las primeras décadas del siglo XX. Fue reconocido en 1974 por la Unesco como pedagogo y humanista, y canonizado en 2003 por san Juan Pablo II.
Inició su labor en Guadix, Granada, en 1901. Estudió en el seminario de esta ciudad. Las cuevas que la coronan eran refugio de ladronzuelos, golfos, proscritos, trabajadores humildes y gitanos. En aquél laberinto de agujeros en la tierra arcillosa, no se aventuraba la “gente bien”, y ni siquiera la guardia civil. Allí el seminarista advierte enseguida que, junto al hambre física, hay hambre de saber y descubre su vocación a la enseñanza. Funda las escuelas del Sagrado Corazón, ayudado por gente de todas las clases sociales, desde el rey Alfonso XIII, ministros, nobles, hasta suscriptores del pueblo accitano. Poveda se pasea con una mula por los alrededores recogiendo comida y dinero para su obra socioeducativa. Nunca tiene un duro en el bolsillo pero nunca le falta para las cuevas, y poco a poco se alzan escuelas primero para niños y luego para niñas.
Esta acción, como suele suceder, despertó gran simpatía, a la vez que recelos y envidias en sectores de la sociedad “bienpensante”, laicos clericales, y algunos eclesiásticos, incluido el obispo, mal informado, que había sido hasta entonces su protector que lo introdujo entre los familiares de la curia.
Aquí se abre un paréntesis doloroso para Poveda que dura poco. Tras alejarse por voluntad propia del entorno accitano, bella ciudad, objeto de la primera evangelización por san Torcuato, uno de los siete varones apostólicos, que la tradición afirma fue enviado por el mismo san Pablo, desde Tarragona. Poveda decía mucho después: “confieso ingenuamente que pensé que me enterrarían en las cuevas”.
Herido, cansado, enfermo, por una serie de malentendidos, en los nombramientos, providencialmente recala en Covadonga, Asturias. Con tiempo para meditar, al lado del chorrón, tras el que se vislumbra la imagen de María, reflexiona sobre la situación educativa del país y de Europa, y en 1911, inicia un movimiento, impulsado por mujeres, origen de la Institución Teresiana, para formar profesorado cristiano. Decía: “Quién sabe para qué me ha traído Dios tan joven a este santo lugar”. Aquí la Santina le inspiraría primero la idea de aunar la labor de los maestros católicos, que no llegó a cuajar, y luego fundar la Institución Teresiana.
Su obra se extiende muy rápidamente. Abre academias para normalistas, residencias universitarias, colegios de primera y segunda enseñanza, y centros pedagógicos. Crea una amplia red de profesionales, personas vocacionadas a unir fe y ciencia, fe y cultura, fe y justicia, en tiempos muy difíciles. Desde el principio, se incorporan a la Obra, farmacéuticas, médicas, etc. aunque el grueso de los miembros son educadores. Poveda pensó en usar los medios públicos para su labor, en paralelo con los colegios de católicos. Una idea innovadora, providencial cuando inició la persecución religiosa.
En Jaén, el joven sacerdote conocerá a Pepita Segovia (Elena Furiase), primera graduada por la Escuela Superior del Magisterio, y primera inspectora de primera enseñanza de provincia andaluza. Primera directora de la Institución Teresiana, será pilar insustituible en la Obra de Poveda, dentro y fuera de España. Y a la muerte de este, reivindicó los años pasados “pensando y proyectando” juntos. Josefa Segovia es venerable, y su proceso de canonización sigue los plazos de la Santa Sede.
Muy interesante la vida de este santo. Intentaremos ver la película.
ResponderEliminarEn casa conocemos mejor a Don Bosco. Los niños van a un colegio salesiano.
Es curioso, pero la vida de estos santos me parecen que son paralelas...
Gracias por tu entrada.
Feliz fin de semana!!
Te encantará su vida, es el fundador de la Institución Teresiana y Josefa Segovia, su primera Directora General. Tienes aquí en el blog entradas sobre ellos.
EliminarTanto el padre Poveda como Don Bosco realizaron una enorme labor educativa. En León, existe un centro salesiano, conozco a varios y son personas estupendas. También hay salesianas de María Auxiliadora.
La Institución Teresiana cuenta también con un centro, mis hijas estudiaron allí y pertenezco a la Obra. Una de las experiencias más importantes de mi vida. Vivir la fe en grupo es necesario, y más en estos tiempos, que no son muy diferentes a los que vivieron ellos en cuestiones de fe. Una experiencia muy bonita para mí.
Un beso grande, Maite.
¡Feliz fin de semana!
Esta es una maravillosa noticia y la película con la vida de este gran santo que tanto influyó en la juventud y que supo morir por el nombre de Cristo es necesario que se conozca más, sobre todo en estos tiempos.
ResponderEliminarFelicidades por la parte que te toca.
Que tengas un feliz fin de semana y muchos besiños, querida Rosa
Sí, es una maravillosa noticia y la película tiene muy buena pinta. Es muy bueno que se conozca más su vida y su Obra, que permanecen muy vivas.
EliminarLa figura de Josefa Segovia fue capital cuando él faltó. Una gran mujer.
Espero que estés mejor.
Besiños a montones para ti.