¿SUCEDE la belleza sin nosotros o la crean los ojos al mirarla? El ojo es sólo parte de lo bello, cristal vivo en sus trémulas urdimbres, al igual que los astros. Pero no es él quien dilucida, sino el alma, y ésta puede observar desde muy lejos, porque ya ha visto, y sabe, y ella misma es también lo mirado. Hay en el mundo muchos sitios secretos en los que arde la belleza a esta hora y yo no estoy ni existe otra conciencia —trepa el puma por un árbol sin nombre en la recóndita selva cifrada; en la montaña surge, muy alto y a trasmano, inverosímil, un lirio, hijo del alba, que en la tarde se desvanece cuando el sol declina; cae la lluvia en el claro de algún bosque y la luna la pulsa como un arpa en mitad de la noche—; sí, transcurre a solas la hermosura en nuestra ausencia, aunque no en vano late, pues el alma la considera y la comprende. Y no hay en lo que digo soledad, derroche de lo creado. Hay abundancia fértil, continuidad de un todo inacabable, honda misericordia de la vida.
Eloy Sánchez Rosillo
Chopin: Piano Concerto No.1, Movement 2 - Largo, Romance (Zimerman)