La nieve es un poema. Un poema de resplandeciente blancura.
En enero cubre la mitad norte de Japón.
Allí donde vivía Yuko, la nieve era la poesía del invierno.
Contrariando los deseos de su padre, Yuko abrazó la carrera de poeta los primeros días de enero de 1885. Decidió no escribir sino para ensalzar la belleza de la nieve. Había hallado su camino. Sabía que nunca se cansaría de aquella vida deslumbrante.
Los días de nieve tomó la costumbre de salir muy temprano de casa y caminar hacia la montaña. Siempre iba al mismo lugar a escribir sus poemas. Se sentaba bajo un árbol con las piernas cruzadas y permanecía allí largas horas eligiendo en su retiro las diecisiete sílabas más hermosas del mundo. Luego, cuando sentía que por fin dominaba el poema, lo escribía en un papel de seda.
Cada día un nuevo poema, una nueva inspiración, un nuevo pergamino. Cada día un paisaje distinto, una luz diferente. Pero siempre el haiku y la nieve. Hasta el anochecer.
Regresaba siempre para la ceremonia del té.
Nieve, de Maxence Fermine
La Madre Naturaleza en sí misma es bella. Bonita entrada, Rosa.
ResponderEliminarEnhorabuena. Un abrazo.
Sí, toda ella. Estos días, quizás esperando la nieve, busqué este fragmento.
EliminarNo termina de nevar como suele ser habitual en esta época.
Me alegra que te guste. Es un relato que conduce al arte de la poesía.
Gracias, Mari Carmen.
Un abrazo para ti.
La nieve siempre llama a la poesía, lo que ocurre es que no estamos acostumbrados a verla en vivo y en directo, al menos yo.
ResponderEliminarBesos.
¡Hola, Tracy!
EliminarAquí sí que estamos acostumbrados, pero este año parece que se resiste.
Un beso fuerte, Tracy.
Un fragmento de belleza exquisita. Indagaré.
ResponderEliminarSiempre gracias
Sí, es de un profundo lirismo. Es un fragmento de este relato o novela corta, editado en Anagrama.
EliminarYuko le dice a su padre que quiere ser poeta, a lo que el padre responde: “La poesía no es un oficio. Es un pasatiempo. Un poema es agua que corre. Como este río.”
Te dejo otro fragmento:
“Una mañana, el ruido de la jarra de agua al estallar hace germinar en la mente una gota de poesía, despierta el alma y transmite su belleza. Es el momento de decir lo indecible. Es el momento de viajar sin moverse. Es el momento de ser poeta.
No adornar nada, No hablar. Mirar y escribir. En pocas palabras. Diecisiete sílabas. Un haiku.”
Creo que te gustará.
Un beso y gracias a ti, Maite.
Gracias Rosa. Lo voy a leer. He ido a la biblioteca y allí me estaba esperando. ¡Cuanto aprendo contigo!
EliminarAntes de Navidad. también leí un libro de Susana Nenet, ya me he aficionado a los haikus, me parecen formidables.
Te diré que siempre he sido reticente con la literatura oriental,pero estoy descubriendo verdaderas maravillas. Si me permites, quizás ya lo hayas leído, El jardín del samurai de Gail Tskiyama. Me pareció una lectura maravillosa, y la historia es realmente cautivadora. Esta tarde empiezo con Nieve. Gracias.
¡Me alegro!!! ¡Qué casualidad!
EliminarHoy me comentaba una amiga que muchos de los poemas orientales alcanzan cotas parecidas a nuestros místicos. Asistió a una lectura y le parecía en ocasiones estar escuchando a santa Teresa. Si quieres te puedo mandar algunos estudios que me han dejado. Es bueno conocerlos. Hay un poeta y místico musulmán que te gustará, Rumi.
Gracias a ti, leeré el libro que me dices.
¡Yo sí que aprendo contigo! Me encantan tus comentarios. Creo que deberías abrir un blog, seguro que sería delicioso :)
Un beso y muchas gracias, Maite.
Estaré encantada que me mandes estos estudios. Me he encontrado a Rumi en algunos libros de aforismos, pero no lo he leído como tal.
EliminarRelato precioso el de Nieve. Me está gustando mucho, un cuento lírico, no sé cómo descubrirlo, tiene algo más que una simple lectura... si sigo así, terminaré copiando el libro (me gusta quedarme con alguna frase bonita de cada libro que leo, pero este tiene muchas y muy bonitas) Gracias por el hallazgo.
Si necesitas un correo electrónico, dímelo.
Lo del blog, lo tengo en mente.
¡Holaaaaa!
EliminarMe alegro mucho de que te guste, también copio frases, es una "manía" que tengo.
Sí, si me lo puedes dejar, te envío cosas.
Si tienes en mente lo del blog, no sabes ¡cuánto me alegro!!! ¡Ánimo!!!
Un beso, querida Maite.
Ya terminé Nieve. Qué delicia. Me ha encantado, es un cuento que tiene mucha profundidad, la verdad es que hace meditar, la perspectiva del blanco, los colores, el arte está interiorizado en el alma de cada cual.... Te agradezco.
EliminarMi correo: mtlm_2@terra.com.
Siente libertad tanto para enviar como no enviar. Besos, Rosa
También me encantó todo lo relativo al color blanco y cómo descubre que es poeta. Es sencillo y profundo, como todo lo bueno.
EliminarGracias, te enviaré una selección.
Un beso, Maite.
Creo q ya habra nevado en Leon. Que no daria yo por un poco de nieve q me refrescara la cara y el alma.
ResponderEliminarPrecioso el relato, dice mucho del poeta.
Besiños, Rosa,
Mira el correo
¡Holaaaaaa!
EliminarEn la provincia sí ha nevado, en la capital todavía no.
Es una novela corta que dice mucho sobre el camino de cada uno y lo relata con un profundo sentido poético.
Miraré.
¡Cuídate mucho!
Besiños, mi querida Militos.
Rosa creo que no te va a llegar el correo, lo hice con el móvil y he venido al PC para comprobarlo y no consta como enviado.
ResponderEliminarasí que no te extrañe no encontrarlo.
Mañana, si Dios quiere, lo haré desde aquí.
Sólo te contaba como me encuentro.
Muchos besiños, ya de sábado
Sí, no lo encontré.
EliminarBesiños, mi querida Militos.
Qué paz...
ResponderEliminarY qué privilegio tener ese tiempo para fundirte en ella y lograr una poesía al día.
Y bien merece la poesía ser escrita en papel de seda.
Besos, querida Rosa