¿POR QUÉ te esmeras tanto en esa hoja?
¿A qué tanto tesón en pincelarla?
Primero, verde abril; luego, amarillo
otoño; después, ocre; y al fin, rojo,
rojo crepúsculo. ¡Y si fuese una...!
Pero es toda una copa
y, copa a copa, un bosque,
el bosque donde solo soy la hoja
que tanto te preocupa
---¡así de excéntricos vivís los genios!---
pintar, pintar, pintar.
¿A qué tanto tesón en pincelarla?
Primero, verde abril; luego, amarillo
otoño; después, ocre; y al fin, rojo,
rojo crepúsculo. ¡Y si fuese una...!
Pero es toda una copa
y, copa a copa, un bosque,
el bosque donde solo soy la hoja
que tanto te preocupa
---¡así de excéntricos vivís los genios!---
pintar, pintar, pintar.
Daniel Cotta, de Alumbramiento
Antonio Vivaldi: Las cuatro estaciones, Otoño, 1er movimiento
Chloe Chua
Hay Genios tan Supremos... precioso poema, Rosa. Gracias por compartir tanta belleza. Besos
ResponderEliminarExcelente poema, maravillosa la naturaleza y grandeza del Creador. Abrazos, querida Rosa. Son tus entradas tan delicadas y bellas. Gracias infinitas. Besos
ResponderEliminarEstos comentarios entraron como spam, no los vi.
EliminarMuchas gracias a ti, siempre.
Un abrazooo enorme.