Dios sabe idiomas.
Lo admiro.
Dios lee
y lee en los pergaminos de nuestra piel,
lee en los surcos de nuestros campos.
Dios es telépata y lee
en los laberintos de nuestro cerebro,
en las líneas de nuestras manos,
en las líneas de nuestros caminos.
Él sabe dónde vamos
y de dónde venimos.
Dios, en cuatro palabras,
es el único que
"se las sabe todas".
Gloria Fuertes
Yo sabía latín.
ResponderEliminarYa no.
Ora pro mí, jajjajaja
Ya ...
EliminarSapere aude ...
Nota bene ...
N. B.
Jajaja ...
Genial, Gloria Fuertes, como siempre.
ResponderEliminarLa imagen que acompaña al poema es preciosa, Rosa.
Delicada entrada.
Besosssssss
:)
EliminarUn beso, Maite.
Qué genial Gloria Fuertes!!!
ResponderEliminarSencilla y genial.
EliminarUn beso fuerte, Tracy.
Tan sencilla en su poética. Qué grande.
ResponderEliminarBesos, querida Rosa.
Esa sencillez me encanta.
EliminarComo ella decía: "Mi poesía está aquí, como nació –sin ningún ropaje de retórica–, descalza, desnuda, rebelde, sin disfraz. Mi poesía recuerda y se parece a mí".
Un beso, querida Verónica.