¿Cómo sujetar mi alma para
que no roce la tuya?
¿Cómo debo elevarla
hasta las otras cosas, sobre ti?
Quisiera cobijarla bajo cualquier objeto perdido,
en un rincón extraño y mudo
donde tu estremecimiento no pudiese esparcirse.
Pero todo aquello que tocamos, tú y yo,
nos une, como un golpe de arco,
que una sola voz arranca de dos cuerdas.
¿En qué instrumento nos tensaron?
¿Y qué mano nos pulsa formando ese sonido?
¡Oh, dulce canto!
Rainer María Rilke
Seguimos caminando y bailando juntos...
Leer a Rilke es una buena opción, sobretodo si esá acompañado de música.
ResponderEliminar¡Gracias, Tracy!!!
EliminarUn beso muy fuerte.
Querida Rosa: perdóname por felicitarte con tanto retraso, ya sabes como ando, pero hoy al recorrer tus post y ver este tan delicado y sentimental , he recordado que el 12 fue vuestro aniversario de boda.
ResponderEliminarEn este día tan especial de la Asunción de María, os encomiendo con todo mi cariño para que siempre os mantenga Ella unidos y felices.
Un beso enorme.
Gracias, querida Militos. También te deseo lo mismo, tú lo haces muy bien.
EliminarUn beso muy grande.