Eclipse Celestial
Una nube, redondo y puro obstáculo,
para mirarte encuentro:
sin errores de gallos,
eclipse de los cielos.
Tu luz en una umbría de blancura:
los que ven, no te vemos:
¡mucho mejor!, a oscuras,
¡la fe!, te ven los ciegos.
Tú, con naturaleza de semilla,
reducido a la mano.
Transformado en harina,
Traspuesto, Trasplantado.
En tan escaso medio tu abundancia,
en tan mezquino círculo:
en su materia blanca,
haces deiforme el trigo.
Noche de Ti, con mengua de tu bulto:
¡victoria de lo plano!
Dios, para nuestro uso,
por el polvo ilustrado.
Cereal geometría de la tierra,
la celeste substancia,
oculta su presencia
en una sombra blanca.
¿Cómo tienes?, bajeza de la espiga,
Mi No Sé Qué en tu sitio…
Enigma, enigma: ¡enigma!
descubierto, escondido.
—¡Oh sacerdote; danos, puro, Aquello,
favor de sí otorgado!
¿Guardas, fiel, el Secreto
que mantienen tus manos?
Miguel Hernández
Ave, verum corpus natum
de Maria Virgine;
vere passum, immolatum
in cruce pro homine;
cuius latus perforatum
vere fluxit sanguine.
O clemens, o pie,
o Iesu Fili Mariae,
miserere nobis.
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Salve, verdadero cuerpo nacido
de María Virgen;
verdadera victima, sacrificado
en la cruz por el hombre;
de cuyo costado perforado
fluyó sangre verdadera.
Oh clemente, oh piadoso,
oh Jesús hijo de María,
ten piedad de nosotros.
de María Virgen;
verdadera victima, sacrificado
en la cruz por el hombre;
de cuyo costado perforado
fluyó sangre verdadera.
Oh clemente, oh piadoso,
oh Jesús hijo de María,
ten piedad de nosotros.
Amén
Bella entrada para celebrar el día de ayer.
ResponderEliminarPerfecto!
Gracias Rosa.
Feliz viernes
¡Un beso!
Eliminar¡Un beso!
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