Sir Joseph Noel Paton
No hay noche, no hay luna, no
hay sol cuando estoy contigo,
tiemblo de quererte tanto,
tiemblo de sentirme vivo,
tiemblo de saber que un día
la espuma se lleva al río,
y en el corazón del hombre
se lleva al tiempo el olvido.
No hay luz, no hay jardín, no hay
noche de otoño contigo,
¡quisiera que se acortara
el tiempo cuando te miro!
contigo para perderme,
para salvarme contigo,
contigo, Abril, para siempre
por los siglos de los siglos.
Tiemblo de verme en tus ojos
sin comprender el bautismo,
contigo, Abril, primavera,
el nombre nace contigo,
y el ser también en el seno
de tu vientre estremecido,
nieve niña y madre virgen
de mi tiempo y mi destino;
por ti se agrupa el rebaño
por ti se doblan los trigos,
por ti los álamos tiemblan
y el mar se levanta en vilo
como los pueblos que llevas
en la mirada perdidos
para siempre, como el tiempo
que vuelve a nacer contigo,
contigo para salvarme,
para perderme contigo
como el beso que no sabe
sobre qué boca ha nacido.
¡No puedo verte, no puedo
verte cuando estoy contigo!
¡no sé mirarte, no sé
mirarte, pero te sigo!
tuyo seré madreselva,
madre viento y madre río,
isla de ti solamente
mi nacimiento continuo,
que estoy con dolor queriendo
lo que muero y lo que vivo,
lo que vivo y lo que muero
de tenerlo sin vivirlo.
· · · · ·
Ya el tiempo es sólo el espejo
donde te sueño lo mismo
que los chopos en invierno
sueñan su verdor florido.
Luis Rosales
No conocía esta poesía de Luis Rosales. Me ha gustado mucho.
ResponderEliminarEs preciosa, preciosa... Rosales es inconfundible.
EliminarUn beso fuerte, Tracy.
Lo sabía! No conocía este poema, pero según lo iba leyendo que era de Rosales ni dudarlo.
ResponderEliminarQue preciosidad, es que sientes que lo siente.
Maravillosa buscadora de poemas eres y eso es ser poeta y amar la poesía. Y de imágenes ni digamos.
¿Por qué será que leerte es recordar a alguien?.
Besiños, Rosa.
Sabía que te gustaría, sientes que lo siente, así es, y hace que lo sientas...
EliminarAmo la poesía, cada día leo poesía, soy más de poemas que de poetas, pero Rosales, siempre que lo leo, me llega al alma. Tus poemas también me llegan al alma, muy dentro, me siento tan identificada con lo que dices... Qué suerte ser poeta/poetisa, es un don maravilloso...
Besiños, querida poetisa (me encanta decirte poetisa, lo eres siempre, aun cuando escribes en prosa, te nace muy dentro...).
Se me olvidó, os lo dedico a las dos, amigas y amantes de la poesía...
EliminarGracias, Rosa, me alegra compartir esta hermosa dedicatoria con Tracy.
EliminarBesiños