Parque de Quevedo. León
Los árboles
son los ángeles
de la guarda
en la ciudad.
Carmen Cristina Wolf
Cada día, cuando me dirijo a mi trabajo, escucho los pájaros cantar y hoy, especialmente, me di cuenta del significado de este poema. Siempre he vivido sus trinos como un regalo, doy gracias. Hoy, recordé estos versos al escucharlos, trinaban y trinaban... me encontré por el camino con personas muy significativas para mí, hacia tiempo que no nos cruzábamos; solo nos saludamos: ¡hola! ¡buenos días...!
¡Qué bonito!
Esta reflexión la añado ahora, después de vivir y sentir a los pájaros cantar... hoy mismo...
Es una frase muy acertada.
ResponderEliminarBesos
¡Hola, Tracy! Fue muy bonito...
EliminarMe alegro de encontrarte en este momento...
Un beso muy fuerte.
Pareces Mary Poppins...
ResponderEliminar:P
Ay, Toro, fue así, una sensación muy bonita la que tuve...
Eliminar:P
Que parque tan bonito, amo los árboles y cuando los pájaros anidan en ellos y ofrecen sus mejores trinos.
ResponderEliminarEntiendo tus sentimientos de esa mañana, Rosa, hay veces que estas cosas son una explosión en el alma, una felicidad inexplicable que pocos entienden.
BESIÑOS
Sí, fue un instante precioso, trinaban como una sinfonía, muchos, siempre les escucho, pero el martes fue especial, además las personas con las que me crucé en ese momento, en ese instante, las tengo mucho cariño, hace tiempo que no nos cruzábamos, nos sonreímos y no dijimos nada más que ¡hola!, ¡buenos días!, nos lo dijimos todo... fue como una conexión que sientes especial, me entiendes muy bien...
EliminarBESIÑOS CÓMPLICES, querida amiga.