Vladimir Paroshin. Mar Negro por la mañana.
¿Sabes por qué el mar es tan grande, tan manso y tan poderoso?
Porque teniendo la humildad de colocarse
unos centímetros por debajo de todos los ríos,
descubrió que podía ser grande
aprendiendo a recibir.
Patricia Hashuel
Que mar tan luminoso para ser Negro y que bonita verdad la del recibir, algo que no todo el mundo sabe.
ResponderEliminarBesiños, Rosa, que gusto leerte.
Es fundamental aprender a recibir. Hoy ha sido un día de recibir mucho...
EliminarBesiños para ti, querida Militos
Una gran enseñanza.
ResponderEliminarSí, Tracy.
EliminarHalaaaaaa, este es tipo Paulo Coelho pero en bueno.
ResponderEliminarBesos.
De acuerdoooooooooo, Toro.
EliminarBesos para ti, Toro.
Menos mal que me has dado la razón.
ResponderEliminarCuando creo que la tienes, siempre te la doy, Toro, y tu razón es tan válida como la mía, yo recibo de ti y tú de mí, esa es la cuestión ¿no crees?
EliminarBesos, Toro.